¿Cuál es el parto natural?
La atención natural al parto normal es una de las opciones que tienen las madres a la hora de tener un hijo. Preparar el momento del parto es una prioridad en el control del embarazo. El parto natural es el parto normal, en el que se respeta la evolución normal y natural del trabajo de parto, en todas sus fases y en el nacimiento del bebé.
Un parto normal es siempre natural. El parto normal es también aquel que ocurre a término (entre las 37-42 semanas) y que inicia de manera espontánea. Sin necesidad de provocarlo. Como hemos especificado, el parto natural o normal respeta los tiempos y fases del trabajo de parto sin intervención médica no necesaria.
¿Por qué se produce el parto?
El parto se produce como la finalización del embarazo con el nacimiento del bebé. Se considera que una mujer inicia el trabajo de parto con la aparición de contracciones uterinas regulares. Estas además aumentan en intensidad y frecuencia, acompañadas de cambios en el cuello del útero.
El proceso del parto debe ser lo más natural posible, dejando su evolución espontánea, y minimizando la intervención de los profesionales a cuando esté realmente indicado.
Siempre, el parto evoluciona en tres fases:
El borramiento y dilatación del cuello uterino.
Descenso y nacimiento del bebé.
El alumbramiento de la placenta (la expulsión de la placenta).
¿Cuáles son los tipos de parto?
Cuando hablamos de cuales son los tipos de parto, éstos tipos de parto los podemos clasificar en:
Parto vaginal espontáneo o natural.
El parto vaginal instrumentado.
Cesárea.
Parto Vaginal
En la mayoría de los casos, el parto vaginal es espontáneo. Es importante saber que siempre que sea posible se recomienda este tipo de parto.
Parto Vaginal Asistido
Dentro del parto vaginal asistido, a pesar de que se intenta siempre un parto natural, en ocasiones, en beneficio de la madre o el bebé, se debe utilizar la instrumentación (fórceps o ventosa). Si la indicación del uso de los instrumentos es correcta y se realiza según las guías y protocolos, la instrumentación puede evitar cesáreas innecesarias. A pesar de ello, su uso se reserva a la indicación médica del especialista.
Cesárea
Es una intervención quirúrgica que permite la extracción del bebé por la vía abdominal.
En casos de fracaso de la vía vaginal es una opción que asegura el nacimiento seguro y sano del bebé.
Existen diferentes tipos de cesáreas:
Cesárea electiva: es la cesárea que se realiza en gestantes con patología materna o fetal que contraindique o desaconseje un parto por vía vaginal. Es una intervención programada.
La Cesárea en curso de parto o de recurso: es la cesárea que se indica y realiza durante el curso del parto por distintos problemas. Generalmente por la no evolución correcta del trabajo del parto.
Cesárea urgente: es la cesárea que se realiza al coincidir con una patología aguda grave de la madre o del bebe, con riesgo para alguno de ellos. Lo que hace aconsejable la finalización del embarazo rápidamente.
¿Cómo conseguir un parto normal?
Para favorecer un parto normal o natural, con la mínima intervención posible, es importante respetar el inicio espontáneo del parto. Evitar la inducción del parto sin indicación médica es aconsejable.
El trabajo en equipo favorece la atención natural al parto normal, sin importar el día y la hora en que se produzca el nacimiento de tu bebé. El respetar los protocolos asistenciales, para que la evolución del embarazo y parto sean lo más natural posible asegura un buen hacer de los profesionales y disminuye la necesidad de intervención en los casos no indicados.
Postparto
El postparto es una fase crucial de adaptación tanto física como emocional.
Durante este periodo, la mujer experimenta muchos cambios que, aunque normales, requieren un proceso de adaptación que puede ser más o menos fácil. Después de la etapa inicial de euforia, excitación, junto la sensación de alivio tras el nacimiento de su bebé, la vuelta a casa puede no ser fácil.
El postparto suele coincidir con una caída del estado anímico, a la que se le suma el cansancio, la posible anemia, y las dificultades con la lactancia.
Al mismo tiempo, también pueden aparecer dudas, miedos e inseguridades características del inicio del rol como padres.
Es muy importante confiar en el propio instinto como madre, así como compartir con la pareja los diferentes sentimientos, en ocasiones ambivalentes, que se experimentan en estos días.
Ante la duda, se debe consultar con el profesional de referencia para una valoración adecuada.
El estar bien acompañada es muy importante en momentos tan importantes como el postparto.